La historia del Pan Libanés se remonta a tiempos antiguos, vinculándose estrechamente con la cultura y la identidad del Líbano. Este pan plano, también conocido como “pita” o “khubz,” ha sido un elemento básico en las mesas de la región durante siglos. Su popularidad se debe en parte a su fácil elaboración y capacidad para acompañar una amplia variedad de platos tradicionales. 

La técnica de cocción en horno de piedra, característica del pan libanés, ha sido transmitida de generación en generación. La habilidad de lograr una corteza dorada y un interior esponjoso ha sido perfeccionada a lo largo del tiempo, convirtiendo la preparación de este pan en un arte que fusiona la experiencia y la tradición.